A mitad del mes de junio, celebramos la semana de la biotecnología, la cual es la aplicación de un conjunto de disciplinas científicas que permiten productos y servicios útiles al hombre promoviendo el desarrollo sostenible.
El 16 de junio pasado, se celebró el día internacional de la biotecnología en coincidencia con los orígenes de la industria biotecnológica. La ingeniera genética Ananda Mohan Chakrabarty desarrolló una bacteria derivada del género Pseudomonas, cuya utilidad radica en descomponer el petróleo crudo para el tratamiento de los derrames de petróleo, favoreciendo con ello al ambiente.
Este desarrollo científico, el 16 de junio de 1980, fue considerado patentable debidamente avalado mediante un fallo emitido por la Suprema Corte de los Estados Unidos. A partir de este fallo se ha aceptado que los genes, siempre y cuando hayan sido aislados, son objetos patentables. Este hecho es considerado el nacimiento de la industria biotecnológica.
Los servicios que brinda la biotecnología, son de aplicación para áreas de salud humana y animal, la alimentación, la industria y el ambiente.
En materia de biotecnología agrícola, los resultados a la fecha muestran los aportes que hacen a la sostenibilidad del ambiente, según el informe del Servicio Internacional de Adquisición de Aplicaciones de Agrobiotecnología (ISAAA, por sus siglas en inglés) la contribución de las tecnologías disponibles contribuyen de la siguiente forma:
- Generar unos 225 billones de dólares en ganancias para los productores;
- La reducción de 776 millones de kilogramos en el uso de productos fitosanitarios en los cultivos;
- Mejoró la condición de vida de 17 millones de pequeños productores y sus familias, alcanzando la cifra a 65 millones de personas;
- La ganancia en productividad a través de la biotecnología salvó 231 millones de hectáreas de la ampliación de la frontera agrícola
- Se redujo la emisión de CO2, en 23 billones de kilogramos, eso es equivalente a quitar de circulación 15.3 millones de vehículos.
Actualmente es preocupación de los científicos la sostenibilidad de la producción de alimentos, ante una población creciente; principalmente en la mejora de la productividad, en relación al espacio de modo a evitar la ampliación de la frontera agrícola.
Adopción de la tecnología
Paraguay, ocupa el sexto lugar del mundo en cuanto a utilización de biotecnología (cultivos transgénicos) en la producción de alimentos, con 4,1 millones de hectáreas sembradas con productos derivados de la biotecnología, según el informe de 2019 del ISAAA. En Paraguay, actualmente están liberados eventos transgénicos para los cultivos de soja, maíz y algodón.
Mirando a nivel macro, el último informe del ISAAA señala que diez países de América Latina cultivaron 83,9 millones de hectáreas de cultivos biotecnológicos. Posicionándose Brasil y Argentina, en el segundo y tercer puesto respectivamente en el ránking mundial, como países con mayor área de siembra dedicada a cultivos biotecnológicos. En artículos recientes del INBIO, ya les contamos de los desarrollos biotecnológicos que se vienen impulsando por investigadores argentinos y brasileños para mejorar las condiciones de cultivos de la región.
Beneficios asociados
El informe ISAAA, además señala una serie de beneficios asociados a la utilización de cultivos biotecnológicos, entre los que se resalta que en los últimos 23 años. Han contribuido a:
- Aumentar la productividad para la seguridad mundial de alimentos, piensos y fibras;
- Apoyar la autosuficiencia en la tierras cultivables;
- Conservar la biodiversidad, evitar la deforestación y proteger los santuarios de biodiversidad;
- Mitigar los desafíos asociados con el cambio climático; y
- Mejorar las prestaciones económicas, sanitarias y sociales.
Tasa de uso mundial
Son 72 los países que adoptaron cultivos biotecnológicos: 29 países son productores y 43 países adicionales importaron.
Por otra parte, en el 2019 190,4 millones de hectáreas de cultivos biotecnológicos fueron cultivados por 29 países: 24 países en desarrollo y 5 países desarrollados.
Los países en desarrollo aumentaron el 56% del área global de cultivos biotecnológicos en comparación con el 44% de los países desarrollados.
La soja transgénica cubrió el 48 % del área mundial de cultivos biotecnológicos.
Fuente: ISAAA – INBIO
