Es la pyricularia o brusone. Un estudio alemán alertó que hacia 2050 afectará al 13% de todos los cultivos y será un peligro para la seguridad alimentaria.
(NAP) Un estudio de la Universidad Técnica de Munich señala que una enfermedad fúngica podría reducir la producción mundial de trigo en 13% antes de 2050, lo que equivale a 60 millones de toneladas perdidas anualmente.
Según el estudio publicado en portales europeos de noticias, el patógeno fúngico Magnaporthe oryzae (más conocido por acá como pyricularia) está prosperando en las condiciones creadas por el cambio climático en las regiones tropicales.
Se prevé que la piriculariosis o brusone del trigo tenga efectos devastadores en la nutrición humana en partes de América del Sur, el sur de África y Asia.
De acuerdo con Senthold Asseng, líder del estudio y profesor de agricultura digital en la Universidad Técnica de Munich, una consecuencia de la pérdida del trigo como alimento básico en algunas de las regiones subtropicales plantea preocupaciones sobre las deficiencias de micronutrientes en las poblaciones que dependen en gran medida de las dietas basadas en el trigo.
Riesgos para los cultivos de trigo
Según el estudio, hasta el 75% del área de cultivo de trigo en América del Sur y África podría estar en riesgo en las próximas décadas.
La amenaza viral pronto podría afectar significativamente a países a los que hasta hace poco solo había llegado marginalmente, como Argentina, Bangladesh y Zambia.
Algunas regiones que antes no habían sido afectadas por el hongo ahora están registrando casos como:
Uruguay
Estados Unidos
África oriental
India
Australia oriental
Se estima que el riesgo para los cultivos de trigo en Europa y Asia oriental sea menor. Con notables excepciones en las regiones mediterráneas de Italia, el sur de Francia, España y las regiones húmedas del sudeste de China.
Adoptar medidas de mitigación
El estudio insta a la adopción de medidas urgentes para adoptar estrategias de mitigación, que incluyan la garantía de la resiliencia de los nuevos cultivos, la identificación e integración de estrategias de gestión de enfermedades y el equipamiento de los agricultores con las herramientas necesarias para mitigar la crisis nutricional que se avecina.
De hecho el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz ty Trigo (Cimmyt), un organismo con sede en México que integran investigadores de varios países, ya emitió alertas por el tema y publicó trabajos para la prevención.
En el caso del autor del informe, al enfocarse en el problema de la seguridad alimentaria propuso reemplazar al cereal en las dietas, aumentando la diversidad de cultivos para el suministro de alimentos y mejorar otros cultivos en regiones específicas, apuntando a una mayor diversidad en el suministro de alimentos.
“Las discusiones sobre la necesidad de diversificar las dietas urbanas para garantizar la suficiencia nutricional ya están ocurriendo. Y los desafíos potenciales planteados por la reducción de la producción de trigo se suman a la urgencia de buscar nuevas soluciones”, dijo Asseng.
POR GABRIEL QUAIZEL (Noticias AgroPecuarias)