por GABRIEL MOLINAS – MARKETDATA
A pesar de la intervención del Banco Central del Paraguay (BCP) vendiendo dólares en el mercado local, la presión persiste, reflejada en la cotización al cierre de este miércoles en G. 7.389.
Analistas explican que, entre los factores que generan presión se encuentran movimientos en los mercados financieros, el diferencial entre la tasa de interés local y externa; y la caída de los precios de la soja.
Agentes del sector productivo confirman que, tras la caída de los precios de este commodity, se registró un 25% menos de ingresos de dólares en comparación al año pasado.
Al cierre del primer trimestre el dólar en el mercado local mostró una cotización que superó nuevamente el límite de los G. 7.300 y ya en las últimas semanas se observó una cercanía hacia los G. 7.400.
El año pasado, al sobrepasar estos niveles, el Banco Central del Paraguay (BCP) afirmó que aún se encontraba en niveles manejables, aclarando además que no existe un tipo de cambio adecuado o meta para una economía, ya que esta se marca conforme al mercado.
Pero como es sabido, el sector agrícola es uno de los principales impulsores de la economía paraguaya, debido a que las exportaciones de commodities, principalmente la soja, permiten el ingreso más importante de dólares a nuestro mercado, año tras año.
Por ello, es importante analizar el desempeño que tuvo el sector agrícola en este periodo mencionado. En una entrevista con MarketData, el presidente de la Cámara Paraguaya De Exportadores Y Comercializadores De Cereales Y Oleaginosas CAPECO, José Berea comentó que si bien el sector a nivel general registra buenos resultados a nivel macro, todavía tienen no solo desafíos climáticos, sino que también problemas relacionados con los precios.
De acuerdo a la referencia de precios de Chicago, la soja hace un año atrás estaba en USD 568 la tonelada, mientras que a la segunda semana de abril en USD 494, lo que deja una reducción nominal de USD 65 por tonelada. Esto daría paso a una menor oferta de dólares en nuestro mercado.
Al respecto, el BCP vendió al mercado cambiario un total de USD 112 millones en lo que va del año, de los cuales USD 33 millones se vendieron solamente en el mes de abril, mayormente con operaciones compensatorias.
Jose Berea añadió que este año, el ingreso de divisas por tonelada de soja ha caído un 25% con respecto al año anterior, sin embargo, comentó que a nivel global, aún se debe esperar el cierre de la zafra y las exportaciones, incluida la cosecha de la Zafriña, para tener una imagen completa.
El mismo estimó que al cerrar este año, es probable que no se tengan menos ingresos que el año anterior, pero esto, debido al mayor volumen de producción que se registraría en ese año en torno a las 10 millones de toneladas, no así por los precios.
“Personalmente, no creo que a nivel global vayamos a experimentar una disminución de divisas en comparación con el año pasado, pero con el mayor volumen de producción que tenemos este año, tampoco podemos estar por arriba”, comentó.
Por su parte, el economista Wildo González, explicó que la suba del dólar se explica principalmente por el desarrollo de los mercados financieros internacionales, donde dos elementos explican probablemente los movimientos recientes, y marcan una tendencia futura en el tipo de cambio nominal.
El primero, la caída de los términos de intercambio (diferencia entre el precio de las exportaciones y las importaciones), ¿Dónde se observa esto?, en la caída del precio de la soja y en el aumento del precio del petróleo, esto pone en una situación donde los resultados positivos de la balanza comercial en cantidades, no resulta en los montos esperados a los precios anteriores (del año pasado), generando una mayor demanda por dólares, por lo tanto, presionando la cotización del dólar.
En segundo lugar, el economista agregó que también está relacionado con el diferencial de tasa de interés la diferencia entre la tasa de interés de la Reserva Federal (EEUU) y la Tasa de Política Monetaria del BCP, que es tomada como una aproximación a la apreciación/depreciación del tipo de cambio.
En este caso, resulta en el cambio en las expectativas acerca de los movimientos futuros de la Reserva Federal (EEUU), donde a finales del año pasado los mercados financieros internacionales, tenían expectativas de 3 a 4 recortes en la tasa de interés, pero con los últimos datos del mercado laboral y de inflación estas han cambiado, ahora siendo la expectativa de dos recortes en la tasa de interés, y algunos economistas renombrados como Lawrence Summers mencionando que no sería descartable un aumento en la tasa de interés o una mantención más prolongada.
“Mencionado de un menor resultado positivo de la balanza comercial, deberíamos agregar el canal financiero, que con los cambios en las expectativas de los movimientos futuros de la Reserva Federal, daría impulso a un fortalecimiento del dólar frente a la mayoría de las monedas de las economías desarrolladas y emergentes. Por lo que, no sería descartable que la depreciación del tipo de cambio sea algo más intensa en el segundo semestre”, estimó.
Intervenciones del BCP
Con respecto al comportamiento del BCP en el mercado cambiario, el economista discrepa con la visión de la mayor parte de las opiniones de mercado, ya que desde su punto de vista, las operaciones se han centrado en días específicos donde la volatilidad del mercado, probablemente no responda a los fundamentos de nuestra moneda, ni a los movimientos en los mercados financieros internacionales.
González recordó que es importante tener en cuenta que el BCP, habitualmente en el primer trimestre termina comprando dólares, resultado de la balanza comercial positiva, que tiende a mantenerse estable en el segundo trimestre (salvo la presencia de shocks importantes), y en el tercer y cuarto trimestre, comúnmente entra a cortar picos de volatilidad, vendiendo dólares, resultado de la balanza comercial negativa, por el incremento estacional de las importaciones, tanto de consumo como bienes ligados a la inversión. El monto acumulado, promedio en que el BCP interviene, no es significativo para el tamaño del mercado cambiario.
Límites de depreciación del tipo de cambio
Al ser consultado sobre el umbral o cotización del tipo de cambio que sería límite para nuestra economía, González puntualizó que sería más importante observar un porcentaje de la depreciación del tipo de cambio, debido a que comúnmente cambios pequeños en el tipo de cambio no son trasladados completamente a los precios finales del consumidor, por lo tanto, no afectaría de manera significativa a la trayectoria futura de la inflación, y por ende, tampoco debería modificar las expectativas futuras de la TPM (el Banco Central reacciona más que a cambios en los precios actuales, reacciona a cambios futuros en los precios).
Además, según el profesional, tampoco representa un peligro de estabilidad financiera, pensando en un probable shock de hoja de balance, cambios pequeños no representan un problema para empresas ni el sistema financiero.
“Obviamente, queda claro que depreciaciones significativas, pueden resultar en un traspaso rápido de los movimientos del tipo de cambio a los precios al consumidor e incrementar la inflación probablemente por sobre las expectativas del BCP y del mercado. Esto debería ocasionar una respuesta del BCP, que podría aumentar la TPM para contener la depreciación”, explicó.
Fuente: MARKETDATA